«Hoy hay segundas marcas de muy buena calidad»

Claudio Carboni: caída del consumo, cambio de hábitos y fuerte presión impositiva en el rubro alimentos

 

El empresario del rubro alimentos Claudio Carboni realizó un balance del año y analizó la situación del consumo, los precios y los nuevos hábitos de compra de los vecinos, en una entrevista con Radio Líder. Además, confirmó su incorporación como secretario de la Cámara de Supermercadistas de la provincia de Buenos Aires y Capital Federal, una entidad recientemente conformada para fortalecer al sector.

 

Baja del consumo y nuevos hábitos de compra

Carboni señaló que durante el último año se registró una baja en el consumo, impulsada por dos factores centrales: la situación económica general y un cambio profundo en la forma de comprar de la gente.

 

“Hoy el peso tiene valor y la gente compra día a día. Ya no existe la necesidad de estoquearse porque no hay aumentos permanentes en la mercadería”, explicó.

 

Según el empresario, el consumidor actual prioriza las promociones, los descuentos bancarios y la compra diaria, dejando atrás las compras grandes que se realizaban como resguardo frente a la inflación.

 

Crecimiento de los comercios de cercanía

En línea con datos difundidos por CAME, Carboni remarcó que los negocios de cercanía ganaron protagonismo, mientras que las grandes superficies perdieron parte de su ventaja histórica.

 

“Hoy jugamos de igual a igual. Antes las grandes cadenas accedían a precios diferenciales, algo que hoy ya no ocurre”, afirmó.

Este escenario permitió que supermercados y comercios del interior puedan competir en mejores condiciones.

 

Promociones y precios para las fiestas

Consultado sobre los precios de fin de año, Carboni destacó que los productos navideños mantienen valores similares a los del año pasado.

Sidra de primera marca: alrededor de $2.000

Pan dulce de primera marca: cerca de $4.000

Opciones más económicas desde $1.000

“Son precios accesibles y no hubo incrementos significativos”, sostuvo.

El fuerte aumento de la carne

 

El empresario fue claro al señalar que el mayor aumento del año se dio en la carne, debido a la escasa oferta y a decisiones tomadas en gestiones anteriores.

 

“No se incentivó la crianza de animales y hoy hay menos oferta. Eso impacta directamente en el precio”, explicó.

 

Además, aclaró que las diferencias de valores entre carnicerías y supermercados responden tanto a la calidad del animal como a la estructura de costos de cada comercio.

 

Segundas marcas y sustitución de consumo

Otro fenómeno destacado fue el crecimiento de las segundas marcas, especialmente en lácteos y artículos de limpieza.

 

“Hoy hay segundas marcas de muy buena calidad, con precios mucho más bajos. El consumidor las prueba y continúa comprándolas”, señaló Carboni.

El peso de los impuestos en los precios

Uno de los puntos más críticos del análisis fue la alta carga impositiva, que según el empresario representa cerca del 50% del valor final de un ticket de compra.

“De cada 10.000 pesos que paga el cliente, aproximadamente 5.000 son impuestos nacionales, provinciales y municipales”, afirmó.

En ese contexto, cuestionó nuevas tasas municipales y celebró la Ley de Transparencia Fiscal, que permite discriminar impuestos en los tickets para que el consumidor conozca cuánto paga realmente al Estado.

Expectativas para 2026

De cara al futuro, Carboni se mostró moderadamente optimista, aunque reclamó políticas de Estado que otorguen previsibilidad.

 

“Tenemos que mirar en positivo, pero hacen falta reglas claras y menos presión impositiva. Todo lo que se recauda de más, lo termina pagando el consumidor”, concluyó.

 

Finalmente, anunció que en febrero se realizará una presentación de la Cámara de Supermercadistas en Chacabuco, con el objetivo de sumar comercios locales y explicar los beneficios de la entidad.